Conferencia

 

Fecha: 18 de junio

Ponente: Juan Li

             Maestro Taoista

 

El camino de la salud interna

 

Hay dos energías, una de integridad y otra de fragmentación. Se trata que se produzca un equilibrio entre estas dos energías, de tal forma que si predomina la de integridad hay una buena forma, mientras que si lo hace la de fragmentación aparecen síntomas de cansancio, debilidad, fragmentación, desintegración. Si finalmente continua, el organismo fallece.        

 

La energía de cohesividad y fragmentación son claves del trabajo energético. Comer bien aumenta la energía de cohesividad y disminuye la de fragmentación. Nuestro potencial de vida disminuye cuanto más nos fragmentamos.         

 

Tenemos cinco sentidos y en esta época, tendemos a enfocarlos hacia fuera y mientras más energía movilizamos en buscar activación de los cinco sentidos, más energía hay que suministrar. A veces buscamos suministros pobres: drogas (que alivian pero luego te fragmentan), etc.         

 

La felicidad como energía y máximo potencial como seres humanos viene con la focalización hacia adentro.         

 

En realidad la energía no viene de los sentidos sino de los órganos vitales.        

 

El corazón potencia el gusto, el riñón la escucha, el hígado la vista, el pulmón el olfato y el bazo-páncreas el tacto.

 

Todos buscamos la felicidad.        

 

Uno busca alegría, bienestar y felicidad de largo plazo.        

 

Frente a las prácticas externas hay prácticas internas de superación personal, son las yogas, como proceso de búsqueda de autodesarrollo personal.        

 

Cuando dirigimos los sentidos hacia adentro, el organismo empieza a a desarrollar cohesión e integridad.        

 

La felicidad que buscamos fuera, tal vez se pueda encontrar dentro.        

 

El descontento se produce por tanta búsqueda, siempre me falta algo para contrarrestar este estado...         

 

Al menos una vez al día el cuerpo, a través del sueño, se desconecta de los cinco sentidos. Así pues, el último pensamiento-sentimiento en la noche determina la orientación de la consciencia en el plano sutil.         

 

Grandes cambios comienzan pequeño se producen cuando los cinco sentidos se conectan con un punto en el interior y se empieza a crear integridad que se manifiesta como calma.       

 

Meditar es orientar los cinco sentidos hacia dentro.         

 

Orientar los cinco sentidos hacia dentro aunque sean 5 segundos es clave para la sanación, porque la mente le cuesta estar en calma. La mente es un reflejo de lo que pasa dentro del organismo.        

 

Los antepasados han utilizado recursos.       

 

Una cualidad que permanece en todas las culturas como lenguaje es la sonrisa. Sonrisa es lenguaje que comunica.       

 

La sonrisa verdadera es aquella va hacia uno mismo, ¿hacia dónde?, hacia los órganos vitales que apoyan el proceso de los cinco sentidos, del sentir.        

 

De ahí surgió la sonrisa interior       

 

Es una habilidad con la que todos nacemos con ella.       

 

La única diferencia es cuando nos hacemos conscientes de hacerla para adentro. Y con una cualidad suplementaria, el agradecimiento.        

 

Comunicarnos con nuestros órganos con sonrisa y gratitud.        

 

La gratitud viene del corazón, que transporta la sangre por todo el cuerpo.       

 

La calidad de nuestra sangre depende de lo contento que esté el corazón.        

 

Las prácticas internas, de comunicación con nuestros órganos, tienen el potencial de cambiar la sangre. Por eso, las prácticas de integridad y cohesión son prácticas de longevidad.        

 

El hígado es el que suministra energía para la visión, la visión de ver las cosas, de percibirlas, la visión de nuestra intuición. Es la visión de la esencia. Es desarrollar la habilidad de percibir la esencia de las cosas en vez de percibir las apariencias de las cosas.         

 

La crisis depende de cómo la interpretamos, una idea se mete. Las ideas tiene la habilidad de perturbar nuestra integridad. El hígado se puede habituar a percibir-interpretar las cosas pesimamente.        

 

Los  riñones crean la capacidad de perseverar, energía de constancia. Los riñones tiene que ver con el miedo, si fluyen generan espontaneamente la capacidad de perseverar sin esfuerzo.        

 

Lograr las metas que nos proponemos. Desarrollar la escucha. Lograr en la vida las metas que nos proponemos que son útiles y fomentan el bienestar en la vida, tanto el personal como el general.        

 

¿Dónde vale la pena perseverar, dónde no me agoto cuando persevero?        

 

Es una buena pregunta para los órganos        

 

Los pulmones  conectan con la respiración, el ánimo. Cuando alguien está deprimido no respira profundamente. Para desarrollar las cualidades de valentía, claridad y optimismo nuestras células requieren oxígeno. Si los pulmones no respiran adecuadamente el proceso de fragmentación se genera.        

 

El bazo- páncreas está conectado con el alimento, pero éste no es sólo físico, sino las enseñanzas que recibimos, el integrar lo útil y dejar lo inútil. El sistema digestivo es la función de digerir cosas: enseñanzas, ideas, comida, vivencias...        

 

Al ingerir algo el mecanismo de discernimiento se pone en marcha.        

 

Escojo sufrimiento y las cosas que lo causan o felicidad.       

 

La Tierra es la dimensión de los cambios, hay tiempo y espacio. Venimos a la Tierra a aprovechar la energía de los cambios, puedo cambiar lo que quiero, si estoy descontento puedo cambiarlo. Desarrollando energía extraordinaria, la de los cambios, logramos realizar nuestro potencial más elevado.       

 

Toda acción genera reacción. Hay un dicho básico, la calidad de la acción genera una calidad de reacción.        

 

La energía de la Tierra produce una reacción de agradecimiento y tenemos la posibilidad de activar la actitud de la Tierra.        

 

La energía terrestre es la que sana, hace falta alguien que de energía. Sonriendo abajo y arriba con lo mejor de tu ser.        

 

El proceso de sanación del ser humano tiene que ver con la integridad y el actuar lo mejor posible para recoger lo mejor posible.       

 

El egoismo es fragmentación y la base de cómo enfermamos. Cuando el pensamiento se fragmenta el organismo se deteriora. Yo sólo por mi cuenta y no me importa el otro es la base del problema. Actuar egoístamente destruye la Tierra. Cualquier factor que fragmente genera descontento, no genera vida y genera sufrimiento.        

 

Hace falta expandir la consciencia y activar al grupo.        

 

Mínimo esfuerzo para lograr máximo resultado y ésto con energía de alta calidad.             

 

Hacemos las cosas no como individuos sino como grupo. Abrimos comunicación con toda la estructura familiar entera. Yo no quiero que en mi familia se repita más tal hecho.        

 

El practicante toma iniciativa y tiene en cuenta el grupo.         

Traemos la mejor sonrisa que hayamos tenido e iniciamos un proceso de regreso, hacia nosotros mismos, es el camino del retorno, el retorno al ser esencial.